Los celos se podrían definir como el conjunto de sentimientos y actitudes que aparecen en una persona, ante el temor de que aquel o aquella a quien amamos, prefiera a otra persona.

Los celos, al igual que el miedo, son algo natural en el ser humano, ya que todo el mundo, alguna vez, ha sentido esas sensaciones, forman parte de nuestras medidas de defensa y de consecución de privilegios. Sin embargo, cuando alternan la vida familiar o escolar, se deben buscar soluciones a esta situación.

¿Qué pueden hacer los padres ante la aparición de los celos?

• En primer lugar paciencia, para que por parte de todos esta una adaptación progresiva de los cambios.
• Hay que hablar con el explicándole que su hermano es un miembro más de la familia al que hay que querer y atender, que a él se le quiere igual que antes. Ponerle ejemplos de otros modelos de familias de varios hermanos y hablarle de las ventajas que luego tendrá el ser varios hermanos, para divertirse, jugar, etc.
• Permitirle expresar sus sentimientos bien verbalmente o bien mediante dibujos o juegos.
• Cuando un niño manifieste una conducta celosa (rabieta, caprichos, etc.) no hay que premiarlo con algún juguete o regalo para que se siente mejor, ya que estaremos reforzando este comportamiento. El niño en seguida asocia “si hago esto y recibo atenciones y juguetes, lo tengo que hacer más veces”.
• Procurar no alterar mucho la rutina familiar.
• Dejarle de vez en cuando que coja en brazos al pequeño (con vigilancia para evitar cualquier accidente) o dejarle que ejerza de hermano mayor cuando es más grande el bebé, de esta forma irán fortaleciendo los lazos de unión entre ambos.
• Repartir el tiempo con la pareja, de forma que, mientras uno se ocupe del pequeño, otro lo haga del mayor, alternativamente.
• Se le deben dar responsabilidades con respecto al hermano pequeño en función de la edad. Por ejemplo, como darle el biberón, ponerle el chupete, empujar el carro, darle de comer, etc. de manera que esto le haga sentirse mayor e importante dentro de la familia. Hay que elogiarlo cuando lo haga.
• Las responsabilidades deben adecuarse a la edad y nunca ser excesivas, ya que esto podría ser contraproducente.
• A las visitas se les puede advertir que no sean exageradas en las atenciones y alabanzas al pequeño.
• Hay que hablar con él sobre las ventajas que tiene ser mayor y la cantidad de cosas que puede hacer con respecto a su hermano.
• Aunque las demostraciones de amor son distintas porque ellos son distintos, el niño celoso deber percibir que los padres quieren todos sus hijos, solo cambia la forma de atenderlos, que se adapta a las necesidades de cada uno.
• Evitar comparaciones entre hermanos.
• Es necesario reforzar la autoestima y al seguridad de quien siente celos.