La empatía es la habilidad de ponernos en el lugar del otro y comprender sus sentimientos, hasta ahí casi todos sabemos definir lo que es la empatía, pero y ¿para qué nos sirve? ¿cómo podemos ser más empáticos?

Es una de las habilidades que encontramos dentro de la inteligencia emocional, entre los beneficios que tiene, encontramos los siguientes: Permite disfrutar de relaciones sociales participando más con el grupo de amigos, compañeros o familiares; Ayuda a sentirse personalmente mejor; Facilita la resolución de conflictos; Predispone a ayudar a los demás y compartir; Aumenta el carisma y el atractivo; Permite ser más respetuoso; Desarrolla capacidades de liderazgo, negociación y colaboración, así como ser mejor considerado por los demás.

Para poder ser más empático con el resto de personas es importante conocer los componentes que forman parte de la empatía. El primero de ellos es saber escuchar. Esto es, prestar atención a lo que nos está contando la otra persona verbalmente, como a las manifestaciones no verbales. La otra persona sabrá que la estás entendiendo si expresas señales como: mirar a la cara, asentir con la cabeza, mostrar expresiones faciales acordes a lo que estamos hablando y además haciendo preguntas sobre los detalles de la conversación.

El segundo es saber interpretar las señales no verbales de la otra persona, como son la entonación, el tiempo de respuesta o el volumen de la voz.

El siguiente paso es mostrar comprensión mediante frases acordes a la situación, como pueden ser “entiendo que te sientas así”, “Debiste pasarlo mal”, etc.

Y por último, ofrecer nuestra ayuda en lo que necesite. Darle nuestro apoyo y preguntarle qué ayuda necesita de nuestra parte.
En muchas situaciones, lo único que necesita la otra persona es sentirse escuchado y comprendido, sin querer ninguna ayuda más. Saber que tienes alguien que te entiende y a quien le puedes contar tus emociones es de mucha ayuda.